Una pequeña historia sobre el silencio administrativo (…o la dejadez)

A finales del 2009 y por motivos que no vienen al caso, solicité una entrevista personal con Baldomero Gaviño, por aquél entonces, alcalde de Bormujos. El secretario, que es el que se ocupa de la agenda del alcalde, tomó nota de mi petición y me comunicó que en cuestión de quince días se pondría en contacto conmigo para concretar el día y la hora en la que podría entrevistarme con el alcalde. Ingenuo de mí, volví contento a casa pensando que la accesibilidad a nuestros gobernantes estaba más cerca de lo que yo imaginaba. Pero al cabo de unas semanas, bien entrado el 2010 y en vista de que el secretario no me había llamado, mi visión (y la de muchos ciudadanos) de que nuestros representantes elegidos con nuestros votos, despegan los pies de la tierra una vez pisan el pedestal de las alcaldías, juntas y gobiernos, no hizo más que reforzarse.

Así dejé pasar un tiempo prudencial en el que no tuve noticias y decidí volver al ayuntamiento a solicitar de nuevo la entrevista. Esta vez, Baldomero Gaviño ya no era el alcalde, merced al acuerdo firmado con su socio de gobierno, por el que pasaba la alcaldía al Partido Popular para el último año y medio de legislatura. Desde entonces Ana Hermoso es la nueva alcaldesa.

En aquél momento volví a solicitar una nueva entrevista con Ana Hermoso a través del secretario, el cual me atendió amablemente y mostrándose muy sorprendido cuando le conté que esa misma entrevista ya la había solicitado unos meses antes aunque no llegó a producirse. Anotó mis datos en la agenda y me aseguró que en un plazo de dos semanas se pondría en contacto conmigo, indicándome que la alcaldesa tenía previsto un día a la semana para entrevistas personales con sus ciudadanos (creo recordar que me dijo que eran los lunes) y que no me preocupara, que me llamaría seguro.

En estas, me volví a casa algo más esperanzado por aquello de “Caras nuevas, intenciones nuevas”…y hasta hoy.

Un año después y a escasos días de las elecciones tengo más que claro que no me llamará el secretario, porque seguro que la agenda se traspapeló -¿se me nota irónico?-, pero dentro de algunas semanas volveré al ayuntamiento. Tanto si vuelve el PDB, repite el PP o entra el PSOE, volveré a solicitar una entrevista y aquí mismo comentaré lo que me dicen.

Baldomero se dejó una tarea pendiente en su apretada agenda, Ana se la va a dejar y Juan Antonio tendrá la oportunidad de hacer honor a su slogan de Para Bormujos, respuestas.